¿Quién es la sociedad para intentar decirme quien tengo que ser? ¿Quiénes son las personas para juzgarme, para decirme qué es lo que supone que debo hacer o no hacer? ¿Por qué será que nos dejamos llevar por esas cosas? ¿Por qué no cerrar los ojos, no escuchar las críticas y dejarnos ser NOSOTROS MISMOS, y no quien los demás quieren que seamos?
Es muy fácil encontrar la felicidad cuando se decide ser uno mismo sin escuchar lo que la sociedad impone. Es fácil ser feliz cuando uno empieza a hacer algo por uno mismo, por las decisiones de uno, y no por lo que los demás imponen. Doy un ejemplo claro: ¿no es mucho más agradable leer un libro por propia decisión que porque debo leerlo para tal fecha impuesta por un profesor?
Empecemos a obrar por nosotros mismos, empezamos a dejarnos ser como realmente sentimos que queremos ser. No dejemos que la sociedad nos cambie, no dejemos que las opiniones nos cambien: ¡seamos felices!
Recuerdos de Kenia.
Hace 3 años
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